Son muchos los hoteles que están haciendo de la sostenibilidad uno de sus atractivos y la movilidad eléctrica es fundamental para desarrollar esos planes de protección medioambiental. Ofrecer a sus clientes con vehículos eléctricos puntos de recarga dentro del propio hotel es clave para esta nueva generación de conductores.

En Iberdrola llevamos varios años colaborando con Porsche Ibérica en el desarrollo de una red de cargadores en enclaves especiales, los Porsche Destination Charging. Estos puntos de recarga se encuentran principalmente en hoteles, pero también en restaurantes, puertos deportivos, campos de golf y otros espacios de ocio.

Son muchas las cadenas hoteleras que han incorporado los postes de recarga para vehículos eléctricos en sus instalaciones. Son un atractivo perfecto para todos aquellos que viajan con sus coches de baterías y pueden aprovechar las estancias en el hotel y en especial las noches para recargarlos, normalmente con un coste muy reducido e incluso gratis. En algunos de estos hoteles se pueden utilizar los cargadores también cuando sólo se usan algunos de los servicios como, por ejemplo, el restaurante, sin necesidad de pernoctar.  

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Dentro de esos innumerables servicios que ofrecen muchos hoteles de lujo ahora se incluye el vehículo eléctrico. Las grandes limusinas que hasta ahora transportaban a los clientes más especiales están siendo sustituidas por vehículos eléctricos de todo tipo para cubrir las necesidades de movilidad de sus huéspedes, pero siempre sin emisiones. El vehículo eléctrico aporta una nueva dimensión al lujo que se espera en los servicios de los grandes hoteles, por su extraordinaria comodidad y silencio de marcha en todos los desplazamientos.

Sin embargo, los vehículos eléctricos que ofrecen los hoteles no tienen que ser necesariamente de gran lujo y tenemos ejemplos de lo más variado con modelos como el pequeño cuadriciclo Citroën AMI, disponible para los clientes de algunos hoteles de los Alpes italianos de la cadena Radisson. O el famoso Hotel The Peninsula de Londres que ha incorporado a su flota dos taxis londinenses reconvertidos a eléctricos, personalizados con el verde corporativo de esta cadena hotelera.

Es interesante resaltar que, para el fomento de la movilidad eléctrica, el Gobierno aprobó un Real Decreto por el que “todos los edificios de uso distinto al residencial privado que cuenten con una zona de aparcamiento con más de 20 plazas” deberán tener puntos de recarga. Y los puntos de recarga deberán ser proporcionales al número de plazas de que disponga el aparcamiento. Esto significa que una buena parte de hoteles deberán tener cargadores.

En España, el Hotel Usuhaïa de Ibiza lleva ya varias temporadas poniendo disposición de sus clientes una flota de Smart Fortwo eléctricos, en alquiler con un precio muy especial. Ahora el vehículo que se utiliza en este internacionalmente conocido hotel-fiesta es el nuevo Mercedes EQA, perfecto para recorrer la isla y disfrutar de todos sus atractivos. Además, en el parking del propio establecimiento hay numerosos postes de recarga para esto EQA y también para los vehículos particulares de los clientes.

En el extremo más lujoso y especial está el coche que ha elegido el Hotel The Largo, en Oporto, Portugal: un exclusivo Rolls-Royce Silver Cloud II de 1960 que perteneció a Sofía Loren. El espectacular Rolls ha sido restaurado y reconvertido a eléctrico por la empresa Lunaz, de la que es accionista David Beckham. El precio final del Rolls de este hotel portugués ha sido de 640.000 euros y, por supuesto, sólo lo puede conducir un chófer del hotel que ha sido debidamente formado por los especialistas de Lunaz.

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De hecho, la empresa del exfutbolista ha creado una división llamada “Hotel” destinada a reconvertir clásicos para este tipo de establecimientos de lujo que incluye, además, la formación personalizada de los conductores con ‘profesores’ entre los que se encuentran expilotos de competición, conductores especializados en seguridad e instructores de conducción policial.