El Gobierno ha ampliado hasta el 31 de diciembre de 2024 el Plan Moves III, las ayudas a la compra de vehículos eléctricos o híbridos enchufables que se terminaba este 31 de julio.

No es el cambio que los fabricantes de vehículos eléctricos y los posibles compradores esperaban, pero significa que se mantienen las ayudas que entraron en vigor en 2021, a las que se añade la deducción en el IRPF por la compra de un coche eléctrico o híbrido enchufable, ya sea nuevo o seminuevo con un máximo de 12 meses de antigüedad. Existía un cierto temor de que llegado el 31 de julio de 2024, fecha prevista del fin del Moves III, desaparecieran por completo las ayudas, como ha ocurrido en Alemania, lo que supondría un duro golpe para la expansión del vehículo eléctrico.

Los puntos más importantes que reclamaban fabricantes, asociaciones de consumidores y los clientes eran el descuento inmediato del importe de la subvención en el momento de la compra, y que dicha cantidad no tributase como ingreso en la declaración del IRPF del ejercicio en que se recibe el importe.

Ninguna de esas dos peticiones se ha contemplado ya que se ha prolongado el programa existente por otros cinco meses, en las mismas condiciones y con una dotación económica de 200 millones de euros procedentes de los Presupuestos Generales del Estado, y otros 150 millones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.

LAS AYUDAS DE LAS MARCAS

La mayoría de los compradores de vehículos eléctricos que se han acogido al incentivo del Plan Moves III han tenido que esperar una media de 18 meses para cobrar el importe de esa ayuda. Algunas marcas han decidido dar un paso adelante y descuentan, en el momento de la compra, el importe de la subvención, para hacer más fácil y palpable el descuento real sin tener que hacer el desembolso de los hasta 7.000 euros de la ayuda (si se achatarra un coche de combustión) y esperar a recibir ese importe hasta año y medio después.

Todas las marcas que ofrecen el adelanto de la cuantía del Plan Moves III exigen una condición, que el coche se financie a través de la entidad financiera de la marca y se aplica a las operaciones de compra a partir del 1 de julio de 2024. En casi todos los casos, la financiación del coche va por un lado y el adelanto de la subvención va por otra vía. En este segundo caso se trata de un crédito que, según la marca, puede ser a interés 0% durante 11 o 18 meses. En este periodo el comprador debería haber recibido el importe de la subvención y cancelar ese crédito de las ayudas, que puede llegar a los 7.000 euros en el caso de achatarrar un coche viejo de combustión.

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Mazda ha sido una de las primeras marcas en anunciar el adelanto del importe de las ayudas en la compra de su MX-30. En este caso, el adelanto se realiza a través de un crédito al consumo por el importe de la subvención, con un plazo de 12 meses, con 11 meses de carencia, más una cuota final por el total de la ayuda solicitada y con un tipo de interés del 0%. Es decir, en el mes 12 el cliente deberá abonar el importe de la ayuda.

El grupo Stellantis, que incluye las marcas Peugeot, Citroën, Fiat, Opel y Jeep, aplica las mismas condiciones, pero en este caso el importe de la ayuda no se tiene que devolver hasta el mes 19, es decir, el plazo de espera para que el cliente reciba la cuantía de las ayudas es de año y medio.

Renault y Dacia también adelantan los incentivos del Plan Moves III a los clientes que financien la compra con Mobilize Power Solutions, con un plazo de devolución de dicho importe de 18 meses.

MG lleva desde los primeros meses de 2023 aplicando esta fórmula de incentivar a sus clientes adelantando las ayudas del Plan Moves III, con un periodo de carencia de 11 meses para realizar la devolución del importe de la subvención en el mes 12.

BYD es otra de las marcas que anticipa el importe del Moves II con el mismo periodo de espera para que el cliente reciba la cantidad subvencionada, un año.