Hasta ahora al asegurar nuestro coche teníamos que informar sobre el tipo de combustible y el equipamiento o las opciones que llevaba montadas. Nunca se nos hubiera ocurrido pensar que deberíamos asegurar la manguera para cargar combustible en la gasolinera, porque ese elemento es de la propia gasolinera. Ahora la "manguera" o el cable para recargar nuestro eléctrico en muchas ocasiones es de nuestra propiedad, por lo que es un elemento que debemos tener asegurado.

Quedarnos sin gasolina es algo relativamente difícil hoy en día dada la gran cantidad de estaciones de servicio que existen, pero un error de cálculo puede que nos impida llegar a un cargador. Estos son sólo dos ejemplos de esas especificidades que debemos tener en mente cuando estrenemos nuestro vehículo eléctrico y contratemos su seguro.

DIFERENCIAS EN LOS TIPOS DE SEGUROS DE COCHE ELÉCTRICO

Hay aseguradoras que no ofrecen seguros específicos para eléctricos, pero cada vez son más numerosas las que distinguen a este tipo de vehículos y sus especiales características.

A la hora de contratar nuestro seguro debemos pensar en algunas de esas cosas que diferencian a los eléctricos de los de combustión y que tienen que estar incluidas en la póliza.

1. Asistencia en viaje. Debe incluir este servicio también en caso de quedarnos sin batería, desde el Km 0 y sin limitación de asistencias durante el periodo de vigencia de la póliza. Son muy pocas las compañías que suministran una recarga in situ porque la mayoría ofrecen el transporte en grúa hasta el cargador más cercano.
2. Daños por robo o incendio de la batería. El robo de la batería de un eléctrico, a menos que sea de los que cuentan con sistema de intercambio rápido -que en España no funciona de momento-, es bastante difícil, pero el seguro debe tener en cuenta cualquier incidente con este componente que es la parte más cara de cualquier vehículo eléctrico.
3. Cable de recarga. La cobertura del seguro debe hacerse cargo de los posibles daños y robo de los cables, cuyo precio está alrededor de los 300 euros. En muchos vehículos vienen de serie, pero en otros son una opción, por lo que hay que hacerlo constar a la hora de contratar la póliza.
4. Daños en punto de recarga. En este caso debe cubrir los posibles siniestros en nuestro cargador de casa y también los que podamos causar por cualquier motivo en un punto de recarga público.
5. Coche de sustitución ECO. En caso de inmovilización de nuestro vehículo eléctrico, por el motivo que sea, muchas compañías ofrecen coche de sustitución con etiqueta ECO para que podamos seguir con nuestro viaje.
6. Asesoramiento legal y administrativo. Algunas empresas de seguros ofrecen este servicio adicional a sus clientes de eléctricos, para cualquier duda sobre su uso o sobre la instalación de un punto de recarga en su domicilio.

LO QUE TE OFRECE IBERDROLA

Todos estos puntos que te hemos detallado no suelen estar incluidos en el seguro del coche, sobre todo, sin son ofertas especialmente baratas, por lo que es importante revisar bien lo que ofrece la póliza, por ejemplo, en número de asistencias en caso de quedarnos sin batería.

En Iberdrola, a través de las tres modalidades de I+Pack, te ofrecemos un servicio completo de asistencia y otras facilidades que no encontrarás en otras compañías, como llevar tu coche eléctrico hasta tu lugar de vacaciones y luego te lo llevamos de vuelta a casa.

Cada uno de los I+Pack de Iberdrola tiene diferentes coberturas, con pago mensual y sin necesidad de permanencia.

¿EL SEGURO DE UN COCHE ELÉCTRICO ES MÁS BARATO?

La creencia generalizada es que las pólizas de seguro de los eléctricos son más caras que las de los vehículos de combustión, pero eso no es así. El precio de la prima del seguro depende de muchos factores, además del valor de compra del coche también tiene que ver con el perfil del conductor y el tipo de uso que se hace del vehículo.

Un estudio realizado en 2022 por la compañía Rastreator demuestra que, de media, el precio de las pólizas para los vehículos eléctricos e híbridos es un 3% más barato que el de los vehículos tradicionales de combustión. En casos muy determinados, debido a las características o el historial de siniestros del conductor, el precio puede ser superior al de un modelo equivalente de combustión, pero casi siempre pesa más el historial del conductor.

En este mismo estudio, se observa que la búsqueda de seguros para coches eléctricos se incrementó un 8% en 2022 con respecto a 2021. El aumento del interés por parte de los potenciales clientes y el incremento del parque de vehículos eléctricos han permitido que tanto los precios de los coches como el de los seguros se hayan abaratado, en algunos modelos de forma notable, algo que hace que aumente el interés de los automovilistas por cambiar su vehículo de combustión por uno eléctrico.