Certificados de Ahorro Energético (CAEs)

Cualquier entidad que implemente medidas de ahorro energético puede beneficiarse de los CAEs. Esto incluye a empresas de todos los sectores, organizaciones públicas y particulares. Los proyectos deben cumplir con criterios específicos de elegibilidad y ser sometidos a un proceso de verificación para asegurar que los ahorros energéticos son reales y medibles.

Los proyectos deben cumplir con una serie de criterios técnicos y normativos establecidos por las autoridades competentes. Estos criterios incluyen la demostración de una reducción significativa y verificable del consumo energético, la utilización de tecnologías reconocidas por su eficiencia, y la documentación detallada de todas las etapas del proyecto. Adicionalmente, los proyectos deben ser sometidos a una auditoría por una entidad acreditada para certificar los ahorros obtenidos.

Con carácter general, la financiación de actuaciones de eficiencia energética cuyos ahorros terminen convertidos en CAE será compatible con programas públicos de ayuda o de subvenciones, excepto aquellos financiados con cargo al FNEE (Orden TED/815/2023, de 18 de julio, artículo 14.8).

Las empresas que generan CAEs pueden beneficiarse de varios incentivos económicos y operativos. Estos incluyen la venta de certificados en mercados especializados, la mejora de su reputación y competitividad al adoptar prácticas sostenibles, y la reducción de sus propios costos operativos gracias a la implementación de medidas de eficiencia energética. Además, cumplir con normativas de ahorro energético puede evitar sanciones y mejorar la relación con reguladores y clientes.