- Transporte
Las islas en las que se prueba el futuro de la movilidad
15 de junio 2022
3 min de lectura
Las islas son el laboratorio perfecto para probar un ecosistema completo de movilidad neutral, inteligente y sostenible. Recorridos limitados, recursos para la producción de energía verde y, por lo general, una población comprometida con su entorno son los ingredientes perfectos para desarrollar soluciones que luego pueden escalarse para las grandes ciudades.
La ansiada movilidad sostenible no solo implica el uso de vehículos eléctricos, también la forma en que se produce la energía que los mueve y cómo se administran los recursos disponibles no solo para la movilidad, también para todos los usos de la población. Coches compartidos, recorridos también compartidos y baterías para el almacenamiento del excedente de energía solar son las soluciones que se prueban en estos entornos energéticamente controlados.
RÜGEN: LA PRIMERA PRUEBA HACE 30 AÑOS
A principios de los años 90, el gobierno alemán pidió a las marcas de automóviles que exploraran los límites de uso real de los todavía incipientes vehículos eléctricos. La isla alemana de Rügen, en el mar Báltico, con 73.000 habitantes iba a ser el escenario para probar sus posibilidades de uso, ya que los desplazamientos habituales de sus vecinos se ajustaban a los rangos de autonomía que ofrecían los eléctricos.
Entre 1992 y 1996 se utilizaron más de 60 vehículos de diferentes marcas, la mayoría de ellos de Volkswagen, con numerosos Elektro-Multivans y varios Golf CityStromer, además de algunos pequeños camiones eléctricos. El estudio demostró la necesidad de baterías de mayor capacidad, más potencia para los motores y una infraestructura de recarga mucho más extensa y avanzada para poder hacer viable la movilidad eléctrica en la isla.
ASTYPALEA: EL PARAÍSO ELÉCTRICO DE VOLKSWAGEN
Tres décadas después de esa primera experiencia en una isla, Volkswagen inició en 2021 una nueva prueba en la isla griega de Astypalea, de 1.300 habitantes, con un proyecto mucho más ambicioso que implica no solo la movilidad eléctrica. La idea es crear en esta pequeña isla un hábitat inteligente y completamente sostenible a partir de sus propios recursos de generación de energía.
Los primeros vehículos eléctricos han sido los de los servicios públicos, policía, autoridad aeroportuaria y ayuntamiento de la isla. Desde junio de 2022 los habitantes de Astypalea ya pueden elegir entre el Volkswagen e-up!, el ID.3 y el ID.4, así como el SEAT MÓ eScooter con importantes ayudas por parte del gobierno griego.
El siguiente paso es la implantación del vehículo compartido y un servicio de trayecto compartido para aprovechar todas las opciones de movilidad.
Pero también se transformará la forma de obtener la energía en Astypalea, que actualmente se consigue mediante generadores diesel. En 2023 se pondrá en marcha un parque solar que proporcionará cerca de tres megavatios de energía verde, con lo que se cubrirá el 100% de la energía necesaria para los vehículos eléctricos y más del 50% de las necesidades de electricidad de la isla.
En un segundo paso, hasta 2026, el renovado sistema energético cubrirá el 80% de la demanda de energía de la isla. Las baterías de almacenamiento permitirán aprovechar al máximo la energía solar. El resultado será una importante reducción de las emisiones de CO2 de la isla y una reducción de al menos un 25% en el coste de la energía que usen sus habitantes.
CHALKI: EL MICROCOSMOS DE LOS Ë-CITROËN
La marca francesa acaba de iniciar un proyecto de movilidad sostenible con sus vehículos eléctricos en la isla griega de Chalki, de solo 458 habitantes. Citroën ha suministrado una flota de seis vehículos eléctricos para la policía, la guardia costera, el municipio de Chalki y la comunidad energética de la isla. El objetivo de esta iniciativa es la electrificación de todos los transportes de la isla y sustituir todos los vehículos tradicionales de gasolina por otros eléctricos.
El plan a medio plazo es el desarrollo integral de la movilidad inteligente y neutra para lo que Citroën ofrecerá a los residentes y empresas de la isla la oportunidad de adquirir vehículos eléctricos de cero emisiones en unas condiciones muy especiales. El proyecto, denominado Chalki Green-Smart Island también implica a otras empresas griegas de energía para conseguir esa neutralidad de emisiones.
FERNANDO DE NORONHA: ESCENARIO DE PRUEBAS DE RENAULT
Este es el tercer proyecto en un núcleo de población que realiza la marca francesa. En este caso la isla de Fernando de Noronha, en Brasil, con unos 3.200 habitantes, es la protagonista del proyecto Noronha Cero Carbon, con la ambición de que en 2030 no circule ningún vehículo con motor de combustión en la isla.
Esta iniciativa empezó a ponerse en marcha en 2019 con un compromiso de Renault Brasil para trabajar en todo el ecosistema de la isla. El primer paso fue suministrar vehículos eléctricos para la administración de la isla, lo que animó a muchos habitantes a adquirir también coches con cero emisiones.
El segundo, llevado a cabo en 2021, ha sido poner en marcha un sistema público de recarga solar mediante estaciones de carga fotovoltaicas. Cada estación permite alimentar hasta seis vehículos de forma simultánea y suministra 26 MWh de energía al año, equivalente a unos 180.000 kilómetros recorridos sin emisiones. Todo el excedente de energía producida por los paneles solares se envía a la red para el uso de la comunidad local. También se han instalado varios módulos de baterías que han permitido duplicar el uso de energía limpia en las horas punta.